(Université Don Bosco, Lubumbashi) – El sábado 31 de mayo de 2025, la Universidad “Don Bosco” de Lubumbashi (UDBL), a través de la Facultad de Ciencias del Hombre y de la Sociedad, organizó una Jornada Científica sobre el tema: “Justicia, paz y derechos: promover la cultura de la paz en la República Democrática del Congo”. La jornada se llevó a cabo en el Valle del Kafubu, en el Posnoviciado “San Juan Bosco” de Kansebula, en Lubumbashi. El evento contó también con la participación del padre Guillermo Basañes, superior de la Inspectoría de África Central (AFC), profesores y miembros permanentes de la universidad, estudiantes, actores sociales, políticos y militares, así como otros ilustres participantes.
De hecho, la República Democrática del Congo, país asolado por la guerra desde hace más de tres décadas, se enfrenta a numerosos conflictos armados que han afectado gravemente la estabilidad social, política y económica de la nación. Este contexto de violencia ha dado lugar a masivas violaciones de los Derechos Humanos e incluso ha socavado los cimientos de una paz duradera. Por ello, la promoción de la cultura de Paz, Justicia y Derechos constituye un desafío fundamental en el actual contexto sociopolítico del país.
En su saludo de bienvenida, que precisaba el objetivo de esta actividad académica, el decano de la Facultad, padre Kalumbu Besa Dieudonné, afirmó que la finalidad es sensibilizar a todos los ciudadanos –en este contexto: profesores, estudiantes, actores sociales, políticos y militares, entre otros– sobre los mecanismos que pueden contribuir a promover una cultura de paz en la República Democrática del Congo.
El programa incluyó ocho conferencias con distintos enfoques interdisciplinarios:
• “La aspiración a la paz: su fundamento antropológico”: a cargo del padre David Mubenga, SDB, Doctor en Filosofía por la Universidad Gregoriana, quien demostró cómo la paz duradera se realiza en la sociedad cuando la persona se siente autónoma en su capacidad de libertad de pensamiento, de expresión y de vivir en armonía con los demás.
• “Del vínculo entre los derechos humanos y la justicia para la permanencia de la paz en la RDC”: de la doctora Maria Katapala, Máster en Derecho Económico y Social por la Universidad de Lubumbashi,quien insistió en que, para perpetuar la paz, es necesario refundar un Estado de derecho basado en la igualdad y en el respeto de los derechos humanos y del entorno.
• “La economía al servicio de la paz: promover una prosperidad compartida”: del profesor Félix Kalaba Bin Senkwe, cuyo discurso se centró en la participación de la economía en una paz sostenible, a través de la distribución equitativa de la riqueza.
• “La contribución de la ecología integral a la paz duradera”, del padre Dieudonné Besa, SDB,Doctor en Educación por la UPS Roma, quien ilustró cómo la paz es una garantía indispensable que el mundo y el ser humano, el hombre y la naturaleza, reclaman.
• “La actualidad de la pedagogía salesiana para la promoción de la paz: buenos cristianos y honrados ciudadanos”: del padre Dieudonné Makola, SDB, quien en su intervención presentó el Sistema Preventivo de Don Bosco –con sus pilares fundados en la razón, la religión y el amor– como un dique contra la violencia.
• “La educación para la paz como fundamento de la convivencia pacífica entre los pueblos”: del padre Pierre Maibwe, SDB, quien insistió en la necesidad de integrar en el sistema educativo congoleño un programa de educación para la paz, “porque el papel de la educación es hacer al ser humano más humano”.
•“La naturaleza del papel de la Iglesia, a través de la Conferencia Episcopal de los obispos del Congo (CENCO), en la construcción de la paz en la RDC”: ofrecida por el abad Bertin Mpemba, la intervención presentó en qué consiste el papel de mediación llevado a cabo por la CENCO entre el pueblo de Dios y la alta dirigencia del país.
• “Qué forma de diplomacia interna y externa para la paz en la RDC”: intervención del profesor Félicien Mulamba, quien insistió en que si el país desea una paz duradera, debe dotarse de una diplomacia de alto nivel.
La paz duradera, de la que el país tiene actualmente una necesidad prioritaria, es una exigencia imperativa a la que cada ciudadano debe comprometerse activamente, porque la construcción de una sociedad serena se basa en el compromiso colectivo y en la voluntad de trascender las diferencias.
