La complejidad de los escenarios sociales y educativos actuales exigen una constante reflexión, acción y postura crítica por parte de las IUS en su caminar educativo-pastoral y pedagógico hacia el encuentro de los jóvenes y en compromiso de educar en el servicio político (Aguinaldo Rector Mayor, 2020). En esta línea se propone discutir sobre los desafíos contemporáneos que enfrenta la educación superior salesiana en general y las facultades de educación en particular como formadoras de educadores, en atención entre otras cosas, a los efectos pandémicos y contextos pospandémicos “nueva normalidad” y el reto del acompañamiento como estrategia educativa. 

En todo ambiente educativo salesiano, la propuesta pedagógica ubica al sujeto joven en el centro del proceso. El acompañamiento y el ambiente de familiaridad, como estrategias metodológicas, propician espacios de participación juvenil y de construcción de ciudadanías. Por ello, en esta línea se propone reflexionar acerca de los nuevos y quizá, novedosos espacios de participación y construcción de ciudadanías juveniles y reconfiguración del asociacionismo salesiano a partir del acceso a redes sociales y el uso adecuado de las mismas, así como plataformas digitales y apps que han configurado una nueva propuesta de interacción social y ahora educativa.

Los contextos en los que se genera la innovación educativa son diversos, desde las instituciones salesianas en todos los niveles educativos se da permanente respuesta a los escenarios emergentes que surgen en la gestión escolar, en el aula, en las familias, en el entorno. Los participantes o actores de las innovaciones son también diversos: comunidad salesiana, directivos, docentes, estudiantes, familias, actores comunitarios, permitiendo una respuesta y aportes desde diferentes miradas e intereses propios de esas actorías sociales. Por eso en esta línea se espera reflexionar y determinar las características, posibilidades y límites de la innovación en las instituciones salesianas, revisar las experiencias en torno a la casa común desde la comprensión de una ecología integral humana y el futuro sostenible de los jóvenes expresado en la Carta encíclica Laudato sí; innovación en contextos de frontera y marginalidad: migración, diversidad religiosa, cultural, pobreza, educación popular, diversidad étnica, trabajo con mujeres en situación de vulnerabilidad, violencia, nuevas tecnologías (cultura digital), energías renovables, interculturalidad y ecología.